lunes, 25 de enero de 2010

El que esté libre de pecados.. que tire la primera piedra!

Me preocupaba mucho tener que trabajar en lugares nuevos, haciendo nuevas cosas, cosas que nunca había hecho. Según los curriculos entregados no solo trabaje en restaurantes como La Parolaccia, Rodizio o en locales de ropa como Complot o Ayres sino que agregue referencias que no existen. Si ya sé, mentí! Perdón.. pero era la única forma de que me contrataran ( Si no sos yankie y estas poco tiempo en la isla no te dan mucha bola). Lo peor de todo no es esto, sino que realmente nunca había hecho algunas de esas tareas. Tenía mucho miedo. Con el correr de los días fui ganando confianza, me fui dando cuenta de que realmente podía venderle ropa a alguien, que puedo llevar mas de 6 copas en una bandeja y  que no se me caigan, que puedo tomar pedidos en otro idioma, que puedo manejar una caja registradora!
Estoy muy orgullosa de mí, no por haber mentido, claro, sino por haberme animado a más. Por haberme superado.

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